"el mundo contra mi"

El mundo en que nos ha tocado vivir es un entorno inseguro e impredecible que moldea nuestro cotidiano sentir interior.

Nuestra sensación de seguridad es bastante precaria y al mismo tiempo nos sentimos abrumados por las advertencias apocalípticas  en boca de predicadores , comentaristas o líderes políticos recordándonos que en cualquier momento podemos sucumbir por nuevas catástrofes ambientales, terroristas,inmortales pestes o miserias económicas.

Intoxicados por dudas nos debilitamos ante objetos conocidos o situaciones cotidianas.

Acarreamos con un lastre emocional caracterizado por una sensación de incertidumbre con la agudización de la conciencia de la conciencia de vulnerabilidad que pone en evidencia nuestra frágil naturaleza.

Tenemos miedos por nosotros y por nuestros seres queridos .Pero no es el miedo con que nacemos, que nos ayuda a sobrevivir ,sino una mezclas de fobias  e hipocondrías que nos paralizan incapacitando nuestro desarrollo.

Vivimos intentando mantener el delicado balance entre el inevitable pesimismo y la heroica esperanza.

Es época angustiosa, donde las viejas estructuras parecen derrumbarse, encontrándonos inmersos ante un cambio constante , flujo de la vida, donde todo debe destruirse para poder renacer.